jueves, 16 de agosto de 2007

Manifiesto Cancunero (III)

El Señor Europeo Oriental ha tenido a bien concluir su tan famoso 'Manifiesto Cancunero', nuestra Biblia de cara al tan traído viaje de fin de curso al Parador de Mazagón (ya veréis). Copio y pego. Todos de pie:

8º) En este apartado se va a tratar de la indumentaria. Lo más parecido a una corbata que han de vestir los chismarracos es el hilito de tequila que te resbale por la barbilla y termine por el pecho. Se premiará a todos aquellos que bajen a la playa o se lleven todo el viaje con camisetas estilo “Autservicio Angelita” o “Ultramarinos Eusebio”. También se aceptarán camisetas con “Locutorio Wilson” o “Peluquería Yambombé”. Aquí nada de chanclas Reef o Billabong, aquí zapatillas del Mcdonalds o con banderitas de Brasil. Se premiará a la persona que lleve una toalla en la que se pueda jugar al parchís o cosas por el estilo.

9ª) Hemos llegado al tema de las habitaciones. Aquí cada uno va a poder dormir donde le plazca, ya sea en el suelo, en el pasillo, en el bidé o en una cama (hay gente pa tó). También se va a poder elegir la configuración de la habitación porque si hay alguien que sea zoofílico hay que respetarlo, es como la gente que es sevillista… gustos raros. Eso sí, lo único que se va a respetar de las habitaciones son los cuartos de baño. Eso es sagrado, habrá quien no se duche, pero otra gente sí es higiénica. Se respetará formar la habitación con los componentes que se quieren, siempre y cuando la persona elegida acepte.

10º) El amigo invisible. Preguntareis ¿y esto qué carajo es? Esto no es idea de mi persona. ¿En qué consiste? Pues, si no recuerdo mal, se trata de se hace un sorteo entre los que quieran participar, vamos como un amigo invisible normal, y ahora el regalo es algo que la persona que lo reciba ha de ponerse o usarlo al menos un día en tierras mejicanas. Esto ya deja lugar a la imaginación que tiene que ser algo que provoque risa o sea íntimo, cada cual con su imaginación. Una cosa sí es obligatoria: la entrega de los regalos se hará en público entre los participantes. Quien no cumpla con el juego, volverá en hidropedal a Sevilla.

11) Último y no por ello menos importante que los anteriores puntos. El viaje nunca coincidirá con ninguna fiesta patronal de la Muy Noble, Muy Leal y Muy Heroica Ciudad de Sevilla. Para aquella persona que no lo haya captado: EL VIAJE SE REALIZARÁ, DIOS MEDIANTE, ENTRE SEMANA SANTA Y FERIA.

Aquí acaba este manifiesto que esperamos que haya recogido todo lo esencial.

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